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Normalmente salimos a comer los viernes. El viernes pasado no es diferente, elegimos que iremos a un lugar regional de barbacoa. Para cuando llegamos allí, nos estamos muriendo de hambre. Makenzie está siendo quisquilloso, sin embargo, nada malo, así que creemos que ella tiene hambre. Compramos nuestra comida y nos sentaremos, así como esperamos para que la proporcione. Mientras tanto, Makenzie comienza a gritar asesinato sangriento como si alguien le hubiera cortado el brazo izquierdo. David le usa un sorbo de su Coca -Cola (que normalmente la calma), así como ella procede a golpearlo de sus manos en el piso mientras grita “¡No!” Su Coca -Cola explota alrededor de nuestro lado del restaurante. En serio, la Coca-Cola estaba arrojando la parte superior donde estaba la paja … Elegí a Makenzie y la llevé afuera e intenté calmarla mientras el personal del restaurante tragaba el piso al lado de nuestra mesa. Veo que nuestra comida aparece, así como Makenzie, se ha calmado principalmente, así que vuelvo y veo si ella comerá. No tanto. Ella continúa quejándose, sin embargo, no está gritando como si fuera antes, así que creí que la sostendría y trataría de comer lo que puedo de mi comida.
Cuando creo que no puede obtener ningún tipo de peor, Devin comienza a toser. Luego vomita. Proyectil. Como 3 pies delante de la mesa. Obviamente todo el tiempo que estuve afuera con Makenzie calmándola, Dave deja que Devin beba un vaso entero de té. Nunca es una gran idea. Hace que todos mis jóvenes vomiten si beben tan bien también. Todo el restaurante se despejó después de eso. ¡Supongo que ya no tenían ganas de comer!
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Deseaba encogerme, sin embargo, en cambio me reí. De hecho, no podía dejar de reír. Empacamos lo que quedaba de nuestra comida, así como a la izquierda, justo después de que le dijimos al personal que tenían la suerte de tener la limpieza después de nosotros una vez más. Los jóvenes mayores estaban tan avergonzados. ¡Estoy bastante seguro de que el personal de ese restaurante ahora tiene una foto de nuestro hogar, así como se le ha dicho firmemente que no nos deje en las puertas nuevamente!
Oh sí, así como, por supuesto. En el momento en que llegamos a casa, están bien. En serio, completamente normal. Corriendo por la casa riéndose, riéndose y pasando el mejor momento.
Nota para nunca volver a comer. Al menos hasta que los bebés sean cultivados …
¿Alguna vez has tenido una experiencia loca como esa? Me gustaría escucharlo … ¡comenta y comparte!
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